sábado, 17 de octubre de 2015

Quedaos con ello...

Porque nos obligaron, porque desde pequeñas nos pusieron coronas , vestidos monos, ropa que no nos dejaba jugar. Nos dijeron "que niña más guapa" y nos creímos que era lo único que importaba. Y nos chutaron dosis diarias de príncipe azul y así nos hicieron yonkies del amor y aprendimos a necesitarlo para vivir.
Las princesas son guapas, están asustadas y se enamoran del primero que las salva, y esperan, esperan encerradas en su torre sin hacer nada para escapar de ella. ¿Y nosotras? Nosotras aprendimos a ser como ellas.
Aprendimos a obligarnos a ser guapas, a fracasar e intentar parecerles guapas a los demás, aprendimos a esperar a que el príncipe azul nos salvara la vida y aprendimos también a que estas dos cosas eran una pelea, una lucha continua, que significa sentirnos amenazadas por las demás no vaya a ser que sean más guapas o su torre esté más cerca del príncipe. Aprendimos a querernos poco y solo a costa de lo que nos quisieran otros.
Y yo os digo que os podéis quedar con mi vestido mono, con mi príncipe azul, con mi espejo y con mi corona. Quedaos con mis complejos, con mis miedos, con mis vicios y con mis celos. Quedaos con todo lo que habéis impuesto y que no quiero.
Porque necesito sitio para las botas, los libros, los cuchillos, los vasos y los ceniceros. Para los bolis y los bocadillos. Para el periódico, la hoz, el martillo y los clavos. Para mis sueños, para caer, fracasar y empezar otra vez. Para mi vida al margen de lo que me enseñaron.
Quedaos con mi reino que me hace falta sitio para el mundo entero.

No hay comentarios:

Publicar un comentario