El periódico El País publicaba esta mañana una fotografía en su cuenta oficial de twitter en la cual aparecían las diferentes prendas de vestir de la mujer musulmana, entre ellos, el hiyab, el burka o el niqab. Los seguidores de dicha cuenta divulgaban todo tipo de comentarios, de todos ellos, la mayoría en contra de la utilización de este tipo de vestuario. Algunos hasta aseguraban que no sabían como se dejaba utilizar este tipo de prendas en una democracia, otros comentaban que estas mujeres no son musulmanas sino esclavas, por contra había quien defendía el tema.
Claro que este arquetipo debería de estar prohibido en España sobretodo porque esto es una democracia. Una democracia en la cual no debemos ser libres de vestir lo que queramos. ¿Y qué tal si prohibimos las mini faldas, las camisetas con escote y los bikinis? Es más, ¿por qué no regresamos a la época del franquismo? Claro, esto es una democracia, no deberíamos de ir enseñando lo íntimo. No, entonces nos enervaríamos todos e iríamos en contra. Cosa que no hacen estas personas. Porqué recordemos que en Lleida está prohibido llevar burka.
Estás mujeres son esclavas, sí, sobre todo porque tienen fe y creen en una religión que les marca, el islam. Ahora seguir una religión es sinónimo de ser esclavo. Todos seguimos una moda, la americana, todos vestimos igual, con los mismos tipos de prenda, ¿no seremos nosotros también esclavos?
No se, si no todos creemos en la religión no deberíamos de criticar y decir lo que nos de la gana, sobre todo chorradas. A veces es mejor cerrar la boca y parecer idiota que abrirla y demostrar que lo eres. Hay personas que tienen mucha fe en su religión e igual les hacemos daño. Como nos gusta que nos respeten, nosotros también deberíamos de respetar sin juzgar las creencias.
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